1/4 parte de una cebolla mediana.
100 gr de jamón serrano.
Una pizca de queso curado
3 cucharadas de aceite.
8 cucharadas de harina.
400ml de leche.
una pizca de nuez moscada
 
En una sartén con un poquito de aceite rehogamos la cebolla a fuego lento sin dejar que tome demasiado color, incorporamos poco a poco la harina y removemos para que se vaya mezclando bien. Según vaya cogiendo forma la masa empezamos a vertir la leche poco a poco y todo a fuego lento para evitar que se pegue. Con paciencia y poco a poco vamos mezclando con una cuchara de madera la masa junto con la leche para que vaya cogiendo forma. Una vez tenga consistencia y este un poco espesa podemos añadir la nuez moscada removemos y a continuación añadimos el queso removemos para que se deshaga y luego echamos los trocitos de jamón serrano. Sin dejar de remover añadimos un poco mas de leche pero siempre manteniendo la masa homogenea, sin grumos y un poquito espesa. Dejamos enfriar en un plato y una vez fria la masa le damos forma las metemos en el huevo batido y pasamos a otro plato con pan rallado. Finalmente freimos en una sartén con abundante aceite bien caliente dejamos dorar y listas para servir.

 

     
   
   
   
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